Lana Merino, el secreto de las Antípodas
Desde hace unos años la lana Merino ha pasado de ser una fibra minoritaria, que sólo unas pocas marcas utilizaban, para estar presente en la mayoría de las colecciones de todas las marcas de referencia dentro del mundo outdoor. El cambio de mentalidad en la sociedad, apostando por las fibras naturales como opción a las fibras sintéticas, y el redescubrimiento de unas propiedades ideales para las actividades de montaña. Han logrado que estas prendas sean de las más demandadas en las tiendas.
¿Pero de dónde viene esta lana? ¿Cuál es su origen? ¿son todas las lanas Merino iguales?
¿Cuáles son sus propiedades?
Estas y más preguntas las resolvemos a continuación.
Originariamente de la península ibérica.
En la actualidad los grandes productores de lana Merino son Australia y Nueva Zelanda, pero como habréis intuido este nombre es español, y efectivamente esta raza de ovejas es originaria de la península Ibérica y el norte de África. Donde durante siglos se concentró la producción y donde las ovejas estaban vetadas a la exportación. Ya que este tipo de lana era muy diferente al resto de las lanas que conocemos actualmente. Lo que la convirtió en un producto altamente estratégico hasta la aparición del algodón.
Así que no fue hasta el siglo XVIII que esta raza empezó a expandirse, primero en países como Francia e Inglaterra, para desembarcar en Oceanía. A partir de ahí, los cambios en el uso, y razas, de las ovejas en Europa, y la intensidad del comercio marítimo las dejó relegadas a pocos países y poblaciones, pese a que esta fibra era altamente cotizada en los mercados textiles europeos.
El resto de lanas solo se podían usar para productos gruesos, como mantas, jerseys, calcetines ya que tenía poca resistencia, y no podían estar en contacto directo con la piel porque daban problemas de picores y alergias a los que los usaban. Pero, a raíz del aislamiento y los múltiples cruces, la lana Merino adquirió más calidad y sobre todo un grosor adecuado para su uso textil, que es el que ha llegado a nuestros armarios en estas últimas décadas.
Propiedades ideales para la vida en la naturaleza
Mientras la industria de los tejidos sintéticos crecía en todos los campos y dominaba por completo el mundo outdoor. Gracias a su ligereza, coste de producción y sus múltiples oportunidades de tejerse. La lana Merino seguía su camino entre trajes para brokers de la City en Londres, alfombras y prendas de diseño a la vez de ser el secreto y la prenda más cotizada entre los pastores y granjeros de Nueva Zelanda. Donde ya era conocida por sus propiedades únicas como;
- Fresca en verano, cálida en invierno. El espacio creado entre las fibras permite la captura del aire corporal en función de la temperatura exterior. Así, se puede estar fresco en temperaturas altas y caliente en temperaturas bajas.
- Control del sudor. La lana Merino puede absorber hasta el 35% de su peso antes de que te sientas mojado. Mucho más que las fibras sintéticas. Lo que crea una barrera natural para regular la temperatura y el sudor.
- Sin olores, ni bacterias. Las enzimas naturales de la lana Merino, no permite la proliferación ni acumulación de bacterias de manera duradera y sin aditivos que desaparecen con el tiempo. Ahorrando en lavados y reduciendo la cantidad de camisetas que debemos llevar de viaje. Y sobre todo, evitando los malos olores asociados al sudor y al uso.
- Baja inflamabilidad. Al contrario que las fibras sintéticas, la lana Merino reacciona muy mal frente al fuego. Lo que aumenta nuestra seguridad y evita sustos cuando queremos secar nuestras ropas en la chimenea del refugio o preparamos nuestro fuego de campamento
- Protección Solar. De manera natural, las fibras aíslan de los rayos UVA y UVB, lo que permite usarla en primeras capas en verano y segundas y terceras capas en invierno en zonas de montaña. Protegiéndonos sin el añadido de cremas.
- Biodegradable. Como fibra natural que es, se degrada sin emitir residuos tóxicos ni contaminantes.
Pero todos estos beneficios ya sabidos, chocaban con dos escollos históricamente importantes, la fragilidad para crear tejidos ligeros y el picor asociado a esos miles de fibras fragmentadas. Hasta que en 1994, Jeremy Moon conoció las ovejas Merino de Brian and Fiona Brakenridge en Nueva Zelanda.
Icebreaker, los pioneros de la lana Merino en el mundo outdoor
Con el paso de los siglos, el aislamiento geográfico y el buen hacer de los granjeros de Nueva Zelanda, las ovejas Merino habían evolucionado para crear una fibra lo suficientemente resistente para poder ser hilada y ser utilizada en prendas ligeras. Así nació Icebreaker, con el objetivo de desarrollar toda una gama de prendas para la montaña basadas totalmente en lana Merino. Buscando la independencia de las fibras sintética y trabajando en cooperación con los granjeros y ganaderos de Nueva Zelanda. Creando una red que ha ido creciendo hasta nuestros días sin perder la misma esencia de trabajo, basado en el desarrollo local y la protección y cuidado de las ovejas.
Todo este trabajo les convirtió en los pioneros y ser la referencia mundial en la elaboración de este tejido. Pero desde hace unos pocos años atrás, el uso de la lana Merino se ha expandido, y casi todas las marcas ofrecen algunas prendas en su colección.
¿Pero son todas las lanas Merino iguales?
Libre de museling, protección animal y comercio justo
Pues, no, no todas las lanas Merino son iguales, ni se recogen por igual, ni las ovejas reciben el mismo cuidado. Esto hace que sea muy importante buscar esta información y recurrir a las etiquetas para ser conscientes de que compramos, porque al principio de la cadena están estos animales.
Así, Icebreaker ha tomado estas medidas para asegurar la calidad del producto y el bienestar de las ovejas, y que pueden servir de ejemplo para basar nuestras búsquedas.
- Ovejas en libertad. Las ovejas pastan en libertad, pero asegurándose alimento y cubierta, para asegurar el mínimo stress.
- Recolección de lana de manera manual y artesanal. Minimizando el dolor que sufren al ser esquiladas y el stress.
- Ovejas libres de Museling. El museling es la técnica que consiste en arrancar tiras de piel de la zona del ano, sin anestesia, para evitar la acumulación de excrementos que atraen a las moscas y las enfermedades.
- Comercio justo en toda la cadena de producción. No es solo trabajar con los granjeros y factorías textiles, si no, también asegurar las condiciones comerciales y de trabajo justas para repercutir directamente en el desarrollo local.
La evolución natural
En la actualidad, y afianzada sobre la misma forma de trabajar que hace casi treinta años, Icebreaker ha llevado la lana Merino más allá de la montaña, no solo creando ropa térmica para el invierno, si no una colección completa para todas las actividades en la naturaleza, viajes, incluso para el día a día, y, por supuesto, para todas las estaciones del año. Ejemplos de ello son las conocidas gamas Oasis, Cool-Lite™ y Tech Lite.