Cómo cuidar tu material de montaña frente al calor
Pero, ¿sabes cual es el elemento que más desgasta el material de montaña?. En principio pensaríamos que sería el agua, el polvo o incluso el uso intensivo, nos imaginamos situaciones de tormenta, de mal tiempo y de malas condiciones. Pero es todo lo contrario, el peor elemento para nuestro material son los días radiantes, donde la intensidad del sol y el calor devoran de manera continua, pero eficaz, nuestro material. Además no importa si escalas, si haces acampada, alpinismo o trail running, muy pocos materiales escapan de su acción.
Así que como ya estamos en verano, hemos creado esta pequeña guía de consejos para poner a salvo tu material, evitando sustos e incrementando su vida útil.
El sol y el calor en la montaña
Durante los meses de verano realizar deporte en la montaña puede ser un reto debido al calor y por la gran exposición a la luz solar.
La luz solar es una energía constante que se incrementa en los días despejados, donde no hay nubes que hagan de filtro, y en verano, ya que estamos más cerca del sol. A esto se une que casi todo nuestro material está creado o tiene muchas partes basadas en fibras sintéticas, las cuales reaccionan mal a los rayos ultravioleta y a las altas temperaturas. Esto es la razón por la cual los cordinos viejos que encontramos en los rápeles son de color blanco, o porqué salta el termosellado de la tienda de campaña en el día menos pensado. Recuerda que durante esta época del año,
Cómo afecta la luz ultravioleta al material de montaña
La luz ultravioleta es la radiación con más intensidad de la luz solar por lo que consigue atravesar muchos tejidos, llegando a dañarlos o modificarlos. Por eso usamos crema solar que nos proteja de estos rayos y no del resto de la radiación. A nuestros materiales les afecta porque desplaza átomos(si, si estamos hablando de átomos), debilitando el material.
Cómo afecta el calor a mi material
Al final el calor es la capacidad de absorción del resto de la luz solar, sobre todo de la radiación infrarroja. Aquí la energía excita los átomos de nuestros materiales para cambiar la estructura o el estado, lo que los hace “estirarse”. En muchos casos ese “estiramiento” es reversible si baja la temperatura, pero en otros caso, como nos debería preocupar, no.
Ejemplos y consejos para cuidar nuestro material en verano
Pero vayamos a lo práctico y veamos unos cuantos ejemplos y consejos, para poder saber si estamos tratando correctamente nuestro material.
Material guardado en el coche
Si hay algo clásico del verano, es tener que dejar nuestro coche al sol mientras vamos a hacer otra actividad y al volver que salga una ráfaga ardiente que nos conecta por un momento con el infierno. Eso afecta a las colas, gomas y plásticos de nuestro calzado y material acelerando su desgaste y prestaciones. Por ejemplo, la suela de tus pies de gato puede quedarse demasiado blanda y no poder hacer toda la fuerza que quieres, tirar de tu mochila y quedarte con el asa en la mano,
Para ello, y aunque sea un poco de jaleo previo, intenta aparcar en un sitio a la sombra, o si no es posible,lleva unos cuantos protectores térmicos para el parabrisas y las lunas. Incluso, si dejás una mini rendija en alguna de las lunas, ayudará a liberar el aire caliente.
Material expuesto a los rayos UV
Esto también te puede pasar en el coche cuando lo dejás aparcado al sol. Por ejemplo, hay muchos escaladores y ciclistas que dejan sus cascos a la vista en el maletero para “identificarse” entre ellos. Esto es quizás una de las peores cosas que se puede hacer, ya que afecta a la integridad tanto del protector de policarbonato en los cascos ligeros, como la estructura de ABS de los cascos rígidos, incluso en las capas de absorción de EPS de los cascos de última generación. Otro ejemplo es el resto de material textil de escalada, sobre todo arneses y cintas express, donde las costuras pueden estar sufriendo un desgaste y no lo veamos. Pero no solo afecta a la escalada, y no solo si lo dejamos en coche. Por ejemplo, si debemos secar nuestro material porque nos hemos mojado, debemos intentar secarlo en un lugar cálido pero no con sol directo. Tanto el agua como los cristales del coche actúan a modo de lente y aumentan la capacidad de los rayos UV, al igual que si tomamos el sol mojados.
Así que para alargar la vida de nuestro material, intenta llevarlo siempre protegido del sol. Y no es posible, intenta minimizar su exposición.
Material expuesto a la luz solar durante las actividades de montaña
Seguro que te estás preguntando, ¿porque el material de montaña le afecta tanto el sol, si es donde voy a utilizarlo? Esa es una gran pregunta, porque en nuestro ideal, deberíamos tener una armadura total contra los elementos y así concentrarnos en nuestros retos. La luz solar es muy destructiva, y las marcas lo que han conseguido es mitigar parte de su impacto haciendo productos que toleran muchos ciclos de absorción. Así que para que dure y funcione correctamente solo deberemos darles un descanso cuando toca, almacenarlo de un lugar fresco y fuera de la luz directa. Además, si de vez en cuando lavamos el material que suele estar en contacto con sudor, limpiaremos de sales que también actúan como amplificador del desgaste por luz solar. O para los escaladores, no dejes las vías montadas con cintas todo el día, los mosquetones estarán muy calientes y aumentará el desgaste de la cuerda.
Colores blanqueados en el material
Este es un signo de que algún elemento ha recibido demasiada luz y/o calor, ya que el calor ha liberado los compuestos volátiles del color. Piensa que la mayoría de los productos proceden de materias primas blancas que se tiñen en función de la colección. Así que aunque a simple vista pueda parecer que todo funciona correctamente, deberíamos hacer una inspección, y más si es material de seguridad.
Esto se traslada a cuando vayas a comprar a una tienda. Es verdad que ya en pocas verás que pasa esto, pero si el artículo tiene otro tono si lo comparas con un mismo producto, puede que haya estado mucho tiempo expuesto en un escaparate o cerca de alguna fuente de luz intensa como luces halógenas. Descártalo aunque te ofrezcan un descuento importante.
Costuras y colas oscurecidas
Otra forma de identificar la exposición intensa es el color oscuro que adquieren las costuras y de nuestros materiales y las colas del calzado. Esto es debido a que se ha sobrepasado la tolerancia de la intensidad y se “han quemado”. Unos pies de gato con la cola de color marrón, mochilas con costuras con diferencias de color entre las de delante y las de atrás, termposellados de las tiendas de color blanquecino o marrón, o costuras de las cintas express o anillos, son ejemplos de ello..
Almacenar el material de montaña correctamente
Como hemos visto el material debe estar protegido cuando vamos al monte, pero uno de los detalles y que muchos hemos fallado alguna vez, es como lo almacenamos en casa cuando ha acabado la temporada. ¿Quien no conoce la historia de algún amigo donde las botas de esquí se han desintegrado en la primera bajada de la temporada o esa chaqueta impermeable que ahora es un colador por las costuras?
Trasteros sin ventilación en terrazas al sol, cuartos de calderas o chimeneas, cristaleras con luz directa son ejemplos de los sitios a evitar para nuestro material. Ya que deteriorará muy rápidamente. Un simple armario o rincón en un lugar templado y ventilado será perfecto.
Ya ves lo agresivo que puede ser el sol para los retos y nuestro material, pero a la vez también has visto cómo con unos pocos consejos podemos protegerlo, que nos duré más tiempo y cumpla con sus prestaciones de seguridad. Y si en algún momento tienes dudas de cómo puede afectar, recuerda que la mayoría de las marcas tienen esa información, o puedes consultar a nuestro equipo técnico. Y por supuesto, recuerda que si tienes en mente realizar cualquier actividad deportiva durante este verano, no te olvides que a ti también te afecta el calor hidratarte en la montaña.